Qué ganas tenía de compartir con todos vosotros esta escapada que hicimos hace un mes! Teníamos un plan: desconectar en El Lodge, un exclusivo hotel en Sierra Nevada y vaya si lo conseguimos. Os he dejado cantidad de fotos pero es que no se me ocurre una mejor manera de trasladaros hasta este paraíso en la sierra. Vamos allá…

El Lodge Ski & Spa es un precioso y exclusivo hotel hecho de madera, tanto en su exterior como interior con no más de 20 habitaciones repartidas en sus dos plantas. Decorado con absoluto mimo y gusto, se convierte en un lugar idílico no sólo para pasar unos días de esquí en la sierra, sino también para relajarse y disfrutar de sus diferentes instalaciones. Piscina de agua caliente, sauna, solarium, baño finlandés, spa, sala fitness, zona de ocio con billar y otros juegos,… Un sin fin de posibilidades para alejarse del estrés!

Os cueto un poco nuestra estancia. Llegamos hacia las 14.00h, a tiempo de soltar el equipaje e ir a almorzar a uno de los restaurantes del hotel, The Sun Deck, el único restaurante de Pradollano con acceso directo a las pistas de esquí (concretamente a la pista Maribel). No sólo disfrutamos de una comida deliciosa sino también de unas vistas espectaculares.

Para empezar una raclette de queso con verduras que no podía ser más propia para el momento. Como platos principales, carrillera sobre cama de patatas para él y pollo al curry con arroz para mí. Insisto, la comida una delicia y más aún en un entorno tan idílico, viendo a la gente esquiar.

El postre y café decidimos tomarlo en la zona de butacas y sillones, con estufas independientes. Todo un acierto!

Nuestra idea era disfrutar ese día del hotel y esquiar al día siguiente. Así que después del almuerzo nos fuimos a nuestra habitación y cual fue la sorpresa cuando vimos el acceso directo (desde todas las habitaciones de la planta) a la piscina  exterior de agua caliente. La experiencia de sumergirte en un agradable baño mientras disfrutas de las frías vistas es indescriptible, ¡hay que vivirlo! Además, al tratarse de un exclusivo hotel, la tranquilidad es máxima y pudimos disfrutar el momento solos.

Junto a la piscina de agua caliente (ningún otro hotel en Sierra Nevada cuenta con una, todo sea dicho ;P ) teníamos una sauna con luz natural y una bañera de estilo finlandés. Mi idea de relax se quedaba corta! Contraste de temperatura con unas vistas de ensueño, respirando el aire más puro de la sierra.

Por último, unas confortables hamacas en la zona del solarium. Y os preguntareis: ¿no pasasteis frío? Pues, sorprendentemente, no. Pensaba que iba a morir en el intento de estar en bañador a 2 grados pero no! No sólo sobreviví sino que lo pasé en grande!

Después del plan de la tarde y de pasar un rato por la sala fitness, decidimos quedarnos a cenar en el hotel, ¿dónde mejor? Su restaurante El Grill, donde además se sirve el desayuno, cuenta con una elaborada carta de platos que nos encantó. No he compartido las fotos porque el ambiente e iluminación cálido, no permitieron tomar buenas fotos. Pero creedme, de 10! jejeje

Empieza un nuevo día! Lo pasaríamos esquiando pero no sin antes cargar pilas con un desayuno buffet espectacular! Aviso que os puede abrir el apetito… jejeje Una amplia variedad de pan, frutas, embutidos y quesos, bollería… por no hablar de la fuente de chocolate, una delicia. Por si esto fuera poco, también tienen disponibles zumos y platos más elaborados en una carta especial.

Nos llevamos de El Lodge con una experiencia inolvidable que esperamos volver a repetir pronto y que os recomiendo muchísimo! Como veis el hotel es absolutamente espectacular pero es que su personal no es para menos, nos hicieron tener una estancia maravillosa.

Sin más, me despido hasta el próximo post; entre tanto, sed felices!

ROCÍO.